domingo, 29 de junio de 2014

EL YIN Y EL YANG EN LOS OMEGA-3

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Según el taoismo, el yin y el yang son las dos fuerzas básicas, opuestas y complementarias, que se encuentran en todas las cosas. El yin representa el principio femenino, la tierra, la oscuridad, la pasividad y la absorción... El yang representa el principio masculino, el cielo, la luz, la actividad y la penetración... Sin embargo, no todo es completamente yin, ni todo completamente yang, pues cada uno de ellos contiene siempre algo del otro, dependiendo del nivel de observación.

Esta oposición y complementariedad del yin y del yang a distintos niveles lo podemos observar en los nutrientes con que alimentamos nuestro organismo. Las grasas, en general, con respecto a otros nutrientes, se consideran yin. Sin embargo, si nos adentramos en un nivel más profundo, observaremos que las grasas de origen animal, generalmente saturadas, toman un aspecto yang con respecto a las grasas de origen vegetal, insaturadas, que son más yin.

Pero… ¿cuál es el yin y el yang cuando nos referimos a unos nutrientes tan importantes como son los ácidos grasos poliinsaturados esenciales omega-3 y los omega-6? Los primeros promueven efectos antiinflamatorios, vasodilatadores, inhibición de la agregación plaquetaria y estimulantes de la respuesta inmunológica, mientras que los segundos son proinflamatorios, vasoconstrictores, favorecen la proliferación celular y deprimen el sistema inmunológico. Se observa claramente como ambos tienen efectos yin y yang complementarios, y es absolutamente necesario para nuestro organismo que haya un equilibrio entre ambos. Cuando se produce una carencia de omega-3 y un exceso de omega-6, como suele suceder en la alimentación de tipo occidental, se favorece la aparición de enfermedades cardiovasculares, metabólicas, autoinmunes y degenerativas.

Profundicemos un poco más, en concreto sobre las propiedades de los omega-3 en trastornos mentales y emocionales. Los dos principales ácidos grasos omega-3 son el EPA y el DHA. Según diversos estudios científicos realizados, el EPA se manifiesta claramente beneficioso en casos de depresión. Es decir, tiene un efecto YANG, mientras que el DHA manifiesta ser beneficioso en aquellos casos en que hay hiperactividad o agresividad, lo que muestra que tiene un efecto YIN. Es importante tener en cuenta estas propiedades cuando se recomienda omega-3, para que su efecto sea realmente equilibrante y eficaz, y no provocar efectos contrarios a los deseados.